viernes, 28 de marzo de 2014

Cada cual

Que cada cual se ocupe de su pena,
yo casi no puedo con la mía.
Cuidadosa en no caer,
recelosa de las miradas.
Impaciente.
Que cada cual cargue con su pena,
yo ya casi no tiro de la mía.
Quieta.
El semáforo sigue en rojo
pero la vida no para.
El viento continúa arrasando,
moviendo cada rastro de mi pelo.
Que cada cual recoja su pena,
que a mi la mía me desborda.

domingo, 23 de marzo de 2014

Me niego

No me gusta hacer apología de la nada.
Detesto convertir un absurdo en ideología.
Hablar de arte cuando es pura estética.
Hacer de una excusa un buen modelo.
No soporto la gente que se esconde en un personaje.
Odio terminar siempre hablando de amor.
Huir de lo evidente,
luchar por lo coherente,
buscar lo ¿decente?
Me niego a afirmarme.


Cara de boba

Ella era lista,
una chica con su aquello,
pelo siempre recogido.
Compleja.
Inquieta.
Ella era guapa,
labios carnosos,
ojos perdidos.
Ella tenía cara de boba,
andares de subnormal,
brazos muertos.
Ropa cutre y sin gracia.
Él no pudo.
Claro que no pudo.

Pautas

No existen pautas.
Llegaste igual que te fuiste.
Lo inminente se hace eterno.
La espera no termina.
No sigas pautas.
Ve cuando salga.
Entra aunque no te esperen.
Duerme sin sueño.
No esperes pautas.
Cuéntame mentiras.
Escúchame las mias
y abrázame muy fuerte.
El miedo siempre apremia.

jueves, 20 de marzo de 2014

Súbete

Escenarios.
Aquí y allá,
sin rumbo,
sin sitio.
Sin destino.
Pasajes de toda pena,
escaleras de caracol,
caminos de vuelta.
Escenarios.
Cafeterías,
trenes,
ese hueco
entre tu boca y la mía.
Un gato mirando tu entrepierna,
el sol quemando,
una despedida.
Súbete.

Mamá Susan

"La imposibilidad de predecir lo altamente improbable
y la necesidad de que ocurra".
Mamá Susan,
con todo su aire loco,
sus ojos tristes
y su pelo malcuidado.
Más guapa que un ángel negro.
Dando vueltas por este eterno pasillo.
Paseando cafés.
Y creyendo que su vida acabó hace ya tiempo.
Mamá Susan,
no puedes decir esas cosas
y pretender que yo te crea.
Que me crea tu ceguera,
tu apatía, tu caída.
Es tan imposible predecir lo altamente improbable
que dudo que pueda conocer a alguien más complejo
que ese pequeño ser que habitas.